La Cámara de Representantes aprobó, con 93 votos a favor y dos en contra, la prohibición de las corridas de toros en el país, tras un arduo proceso legislativo que había fracasado en 14 ocasiones anteriores. Este proyecto de ley, impulsado por la senadora del Pacto Histórico Esmeralda Hernández, marca un hito en la lucha por los derechos de los animales y está próximo a convertirse en ley, pendiente de la conciliación de textos entre el Senado y la Cámara y la sanción. presidencial.
La decisión, celebrada por amplios sectores de la sociedad y respaldada por figuras políticas como el presidente Gustavo Petro, representa un cambio significativo en la cultura y legislación colombiana.
“Hoy es un día en el que Colombia hace historia. Hoy se pone fin a más de 500 años de tortura animal en las plazas de toros”, expresó la senadora Hernández. Esta medida también responde a un clamor ciudadano, ya que el 85% de los colombianos se ha manifestado en contra de esta práctica.
La nueva ley contempla un período de transición de tres años, durante el cual se realizará un censo del sector taurino para identificar a las personas que dependen económicamente de esta actividad y facilitar su reconversión laboral. Posteriormente, en el cuarto año, las plazas de toros serán transformadas en espacios culturales destinados a conciertos, ferias y eventos deportivos, fomentando así el empleo y la economía local.
Además, se implementará un plan pedagógico en colegios y escuelas para promover el respeto por los derechos de los animales, una iniciativa respaldada por el Gobierno a través de varios ministerios. Según el representante de la Alianza Verde Alejandro García, ponente del proyecto, este proceso no solo es una victoria para los derechos de los animales, sino también una respuesta al anhelo de una sociedad más empática y consciente.
El presidente Gustavo Petro, quien ha mostrado un firme apoyo a esta causa, recibió la aprobación del proyecto a través de su cuenta de X (anteriormente Twitter), destacando que “quienes se divierten con la muerte de animales terminarán divirtiéndose con la muerte de seres humanos”.
Con esta medida, Colombia se une al grupo de países que han erradicado las corridas de toros, abandonando una tradición que ha sido objeto de controversia y protestas durante años. La prohibición es vista como un paso hacia una mayor justicia y dignidad, no solo para los animales, sino para toda la sociedad colombiana.
Fuente: CUARTO DE HORA
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