El Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) indicó este jueves que Colombia registró una inflación del 1,25 % en abril con lo que la interanual se situó en el 9,23 %, la más alta en 21 años.

De acuerdo con el organismo estadístico, los alimentos de la canasta básica son los que más registran alza, pues para abril de este año, la división de alimentos y bebidas no alcohólicas sostiene una variación anual de 26,17%, seguido de restaurantes y hoteles (14,37%) y bienes y servicios para el hogar (11,76%).
En ese sentido, Juan Daniel Oviedo, director del Dane, puntualizó que los alimentos explican 0,51 puntos básicos de la inflación mensual, donde productos como el arroz explican 7 puntos básicos, liderando. Además, la leche aporta 6 puntos básicos, al igual que la carne de res. En su conjunto, explican 19 puntos a la variación de 0,51 puntos básicos, la tendencia sigue en alza y se eleva el costo de vida de los colombianos, siendo este fenómeno inflacionario un golpe con mayor contundencia a los hogares más vulnerable pues se convierte en una una reducción del consumo básico, es decir, menor capacidad de adquirir los alimentos necesarios para su hogar.
Según explica El Espectador, los hogares menos favorecidos del país (aproximadamente el 70% de la población) afrontan una inflación 34% mayor que los hogares de mayores recursos. Esta diferencia está asociada en particular a la división de alimentos y bebidas no alcohólicas, que para los hogares más vulnerables es 1,9 veces mayor que la de los hogares de más altos ingresos. Es decir, un hogar de menores ingresos dispone casi dos veces más de su gasto en alimentos que un hogar de ingresos altos. Esto usualmente no marca una diferencia muy significativa, pero en esta coyuntura la inflación anual de alimentos supera el 25%, lo que claramente lesiona esa capacidad de gasto de los hogares más vulnerables.
Cabe aclarar que esto no es un fenómeno solo local sino que proviene de una coyuntura global que están enfrentando todos los países y que se explica en parte por las consecuencias de la pandemia del Covid 19, además del conflicto entre Ucrania y Rusia y los altos precios de bienes agrícolas y energéticos a nivel externo.
Si bien el Banco de la República continúa con su incremento de tasas para frenar la subida de precios, llegando a una tasa de interés del 6%, y el gobierno ha anunciado una disminución de aranceles para disminuir los costos de importación para apoyar a productores agroindustriales, dichas medidas aún no parecen tener el efecto esperado.
Fuente: CUARTO DE HORA