
Dicen que "no todo lo que brilla es oro": En esta fotografía aérea se puede observar el recientemente recuperado Parque Venezuela de la ciudad de Barranquilla, aunque por desgracia
a expensas de una contratación dejando mucho que desear.
La explotación laboral, las jornadas a destajo y las condiciones inadecuadas, no son ajenas a Colombia. Recientemente, guardaparques vinculados a la Agencia Distrital de Infraestructura (ADI) dependiente de la Alcaldía de Barranquilla, denunciaron graves irregularidades que burlan deliberadamente las más elementales leyes que regulan el trabajo.
Como era de esperarse, el temor a perder la fuente de empleo en medio de la crisis social, política y económica que atraviesa el país, a las puertas de una elección presidencial, obligó al personal a hacer su alegato de forma anónima porque al parecer, tampoco contarían con ninguna herramienta legal para hacer el correspondiente reclamo.
Abusos
Aunque los guardaparques perciben la nada despreciable suma de $ 1.445.000 de salario, la empresa contratista no se hace cargo de los gastos de salud, transporte o el almuerzo diario en el comedor.
Como si esto fuera poco, trabajan de todos los días de la semana de 7 de la mañana a 4 de la tarde, sin tener siquiera días de descanso rotativos. Los domingos en vez de pagarlos doble, apenas lo compensan con el valor de un día laborable normal.
Otra de las quejas se debe a las demoras las cuentas para obligar a los trabajadores a venderlas, descontándoles entre $ 200.000 y $ 300.000 pesos por mes, alegando la empresa que al haberlos empleado a través de un contrato de servicio, no tienen derecho a descanso, vacaciones, primas, ni liquidación.
Estos descuentos compulsivos, sumados a los gastos mencionados a cuenta de cada guardaparque, producen una considerable reducción del salario dejándolo muy por debajo del mínimo y prácticamente, los pone en situación equivalente a la de trabajadores ilegales. Algo inconcebible al depender tercerizados o no, de la administración municipal.
Importante
El actual alcalde de Barranquilla es el administrador de sistemas Jaime Alberto Pumarejo Heins, ex Ministro de Vivienda, Ciudad y Territorio de Colombia durante la Presidencia de Juan Manuel Santos Calderón.
Su nombre está vinculado a la casa Char, habiendo sido funcionario de uno de sus miembros más prominentes, Alejandro y de Elsa Noguera cuando resultaron electos a la Alcaldía de la capital del departamento de Atlántico, que apoya al aspirante presidencial del Equipo por Colombia, Federico Gutiérrez.
Escribe: ERIKA MARÍA SERNA GALLEGO*

*Periodista gráfica y radial, de amplia experiencia en medios de comunicación tanto oficiales como alternativos.