El debate en el Congreso alrededor del etiquetado a las bebidas y alimentos poco saludables preparó de alguna forma a los empresarios de las bebidas azucaradas y alimentos ultraprocesados así que el diálogo con el gobierno de Petro y el ministro de Hacienda puede no resultar tan engorrosos.

Se sabe que el ministro Ocampo ya dialogó con Miguel Escobar, presidente del Grupo Postobón, empresa de propiedad de los Ardila Gaviria, que coincidencialmente son primos hermanos del ministro y la tónica es positiva frente al nuevo impuesto.
La Organización Ardila Lule también es dueña de Nutrium, especializada en crear salsas, aderezos, compotas y pulpas de frutas, bajo las marcas Bary, Hatsu, Nature Baby, Pompella y Doña Guayaba. Los Ardila también son dueños de Incauca, empresa agroindustrial dedicada a productos y servicios derivados de la industria de la caña de azúcar.
La familia Gilinksi junto con el Grupo Empresarial Antioqueño, son los dueños mayoritarios del Grupo Nutresa donde se fabrican los productos de marcas como Zenú, Galletas Festival, Crem Helado, Chocolatinas Jet, Galletas Noel, helados como Bocatto y paletas Polet, o jamón Pietran.
El Grupo Gilinski, además son dueños de productos Yupi, de papas Rizadas, Golpe y Tosti, y de Copelia con sus panelitas, cocadas y arequipe.
Salud e impuestos
Uno de los capítulos más importantes de la reforma tributaria de Gustavo Petro tiene que ver con los impuestos saludables.
Estos, como su nombre lo indica, buscan mitigar los efectos de ciertos productos en la salud humana, en particular por enfermedades como diabetes, cáncer y de afección al corazón.
Así las cosas, el equipo económico del gobierno incluyó dos impuestos saludables: bebidas azucaradas y alimentos ultraprocesados.
Y agrega que, además, buscan reducir los gastos del sistema de salud asociados a la incidencia de enfermedades derivadas de las mismas.
Con esto en mente, más allá de recaudar recursos, el Gobierno pretende generar un desincentivo en dichos bienes, tal y como se hizo hace unos años con los impuestos a licores y cigarrillos.
Bebidas azucaradas
Ahora, esta medida se ampliará con impuestos bebidas azucaradas y productos ultraprocesados en Colombia.
En el primer grupo se incluirían bebidas a base de fruta en cualquier concentración, zumos, néctares de fruta, mezclas en polvo y, en general, cualquiera que contenga azucares añadidos o edulcorantes.
De igual forma, estarán las gaseosas y carbonatadas, bebidas deportivas, refrescos y aguas endulzadas o saborizadas.
Adicionalmente, se incluyen:
Bebidas a base de malta.
Bebidas tipo té o café
Bebidas a base de fruta en cualquier concentración.
Polvos que se usen para preparar limonadas, gaseosas o bebidas análogas
Energizantes
Saborizadas
En plata blanca, los colombianos que consuman este tipo de productos tendrían que pagar mayores impuestos al comprarlos.
Eso sí, la reforma tributaria exceptúa productos como fórmulas infantiles, medicamentos con azúcares adicionados, terapias nutricionales y soluciones de electrolitos, por mencionar algunos.
Ultraprocesados
En el caso de los ultraprocesados, el Gobierno señala que son aquellos que requieren poca o nula preparación culinaria y contienen diversas sustancias para mantener dicha condición.
A continuación, el listado de productos al que se les aplicarían estos impuestos:
Carne y despojos comestibles
Embutidos y productos similares de carne
Preparaciones y conservas de carne, despojos o sangre
Papas fritas
Patacones
Chicharrones empacados
Snacks o pasabocas empacados
Galletas dulces
Barquillos y obleas, wafers
Ponqués y tortas
Bizcochos y pasteles dulces
Merengues
Cacao en polvo con adición de azúcar u otro edulcorante
Así mismo, se les aplicaría el impuesto saludable a productos de confitería con y sin chocolate, helados, postres a base de leche y arequipe, manjar blanco o dulce de leche, salsas y sopas, y cereales.
El Congreso Colombia tramitará la reforma tributaria, por ahora, sin mensaje de urgencia. Foto: Prensa Roy Barreras.
El impuesto al consumo de alimentos ultraprocesados tendrá una tarifa del 10 % sobre el precio de venta del bien y contará con algunas excepciones, tal y como lo señala el articulado de la reforma tributaria.
Lo anterior considerando la importancia de algunos de estos bienes en la canasta básica de los hogares colombianos y que no tendrían mayores impuestos.
De esta forma, no se tocarán productos como la mortadela, la butifarra, el salchichón, entre otros.
Fuente: LAS 2 ORILLAS