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De las encuentas y "otros bichos", por LUIS ENRIQUE ARANGO JIMÉNEZ


Escribe: LUIS ENRIQUE ARANGO*


Las elecciones cada vez más son un tremedal de informaciones fabricadas con premeditación, para sugestionar las mentes de los futuros electores.


La expansión de la comunicación en todas sus modalidades, potenciada a extremos impensados con el Internet y las redes sociales ha facilitado esta cruda realidad.


Llegan expertos en la tarea, a modelar las formas de llegar al objetivo fabricando toda suerte de mensajes y estrategias para vender el producto como una mercancía más, independiente de lo que ello represente para el futuro de la sociedad .


A ello se agrega el papel de las encuestadoras de opinión que miden la percepción de los futuros electores e intentan dar la pauta para que los expertos aludidos complementen la tarea, muchas veces en contubernio.


Los datos y las tendencias que publican impactan de paso aquellos electores que buscan siempre estar en la fórmula ganadora, que pueden no ser pocos, y que se cobijan bajo el abrigo del calculador llamado voto útil; lo que podría ser una antítesis del derecho a elegir.


Aunque debiera ser difícil engañar a las personas cuando se trata de decisiones que los afectan como indudablemente es una elección presidencial, muchas veces lo logran haciéndoles creer que están optando por lo que más les conviene, cuando en el fondo están siendo simplemente manipuladas.


Este es el panorama en que nos toca ejercer la democracia en un verdadero campo de batalla minado. Es mi creencia que la única forma posible cómo podemos defendernos del engaño y la manipulación es dudando de todo y haciendo esfuerzos por encontrar la verdad por nosotros mismos, con lo que nos dicta nuestra experiencia y conocimiento.


Yo tengo mi candidato y cada vez que lo escucho me convenzo más que él encarna la única solución que reconcilia y transforma, enfrentando la espiral de violencia que venimos encarando cada vez con mayor gravedad.


Estoy convencido que la situación social en Colombia es real y muy grave. No es un espejismo ni la conspiración de nadie . El modelo económico tiene imperfecciones qué hay que reconocer e intervenir sin demora para el beneficio de todas las partes.


La corrupción ha deslegitimado el Estado y la política, urge combatir de verdad este brutal cancer que amenaza con acabarlo todo.


Desviar la atención para asociarlo todo a asuntos ideológicos es la peor de las salidas. Acentuar la polarización conduce al desastre.


Es imperativo buscar el equilibrio,

el diálogo, la conciliación. Los acuerdos de paz hay que implementarlos de verdad sin subterfugios.


Estamos a 8 semanas de las elecciones presidenciales de primera vuelta, apenas iniciando la remontada de Sergio Fajardo Valderrama; confiamos en que los electores lo llevaremos a segunda vuelta y de allí a la Presidencia de Colombia.


*Dirigente cívico y político. Ex rector de la Universidad Tecnológica de Pereira (UTP)

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