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El poder lo ejerce la sociedad unida y no un líder


Escribe: ZAHUR KLEMATH ZAPATA*

zkz@zahurk.com


Por siglos el poder siempre lo han ejercido los líderes porque son los que comandan la manada. Esto es muy difícil de superar porque existe un concepto de ese poder arraigado en el pensamiento de los seres humanos. Según ellos, los líderes son los que mueven los gobiernos y se comunican entre sí para determinar el orden del mundo actual.

Va a ser muy difícil que de la noche a la mañana cambie esa naturaleza del individuo sobre una realidad que existe de sus entrañas. Ellos van a estar ahí paulatinamente hasta que los cambios genéticos y el intelecto los desalojen de la naturaleza del individuo. Pero a medida que avanza ese cambio tenemos que estar conscientes de que como individuos en evolución tenemos que actuar frente al panorama presente con habilidad para no dejar que esos líderes nos hagan daños por ser serviles a sus causas.

Nuestro libre albedrío nos permite actuar y agruparnos como una sociedad determinante dentro de la misma sociedad para que se dé el equilibrio que se necesita para poder vivir equitativamente, libre, independiente y autónoma de ese liderazgo que ciertos individuos ejercen sobre parte de la manada humana.

Los conflictos presentados en la sociedad se dan porque ciertos líderes quieren apoderarse de los bienes de otros y en ese apoderamiento influyen en esa parte social la cual está subyuga y sigue el pensamiento del personaje sin dilucidar el daño que va a hacer al enemigo y a la población que lo sigue y no.

En la actualidad en la sociedad debe haber un equilibrio que no permitir que una parte inconsciente sea llevada a apoyar decisiones que van a destruir lo bueno que ya se ha construido.

Hemos logrado avanzar intelectualmente a unos estados privilegiados donde el conocimiento del por qué de las cosas lo tenemos presente y el desarrollo tecnológico nos ha puesto a comunicarnos en todos los quehaceres del día alejados del oscurantismo en que vivieron nuestros ancestros.

Si dejamos que otros tomen decisiones por nosotros y nos obliguen a tributar para que ellos vivan en óptimas condiciones, seguiremos como esclavos rechazando las llaves que abren las puertas de nuestra autonomía y libertad.

Podemos equilibrar nuestra vida frente a ese poder existente exigiendo que exista un manejo de la cosa pública como si fuera la empresa pública de los ciudadanos que tributan y reciben las regalías para el bienestar social de todos los contribuyentes.










*CEO del Diario EL IMPARCIAL. Poeta y filósofo estadounidense de origen colombiano.

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